Como mexicanos, existe un sentido innato que nos une sin la necesidad de cruzar nuestros caminos. Dentro o fuera del país, el linaje que compartimos nos hace celebrar la historia de quienes están dejando en alto nuestro nombre alrededor del mundo. Y es por eso que la de Alejandro Martínez es una que merece ser contada.

Son las 7:15 de la noche en la Ciudad de México y todo transcurre con normalidad. El impredecible clima veraniego inunda las calles de frescura mientras la temperatura disminuye junto al ocaso. A través de un monitor que ilumina el interior de una sala oscura, Alejandro saluda con emoción.

“Gracias por tomarte el tiempo de platicar conmigo, eso está muy padre”. En seguida, sentirme en confianza me es inevitable, y es que solo alguien nacido en este país es capaz de comprender que más que un saludo amable, esas palabras son la invitación a una plática sin cabida para el ego. Las mirada de Alejandro Martínez en el cine la televisión Alejandro Martínez es uno de esos nombres que se mueve en la industria del entretenimiento tras bambalinas.

Su trayectoria como cinefotógrafo ha logrado regalarnos algunas de las entregas más reconocidas del momento. A través de su dirección fotográfica en títulos internacionales como House of the Dragon, The Alienist y Fallout, hasta producciones mexicanas como No negociable, Las Azules y El candidato honesto , ha puesto en alto sus raíces de nacimiento. “La figura de mi abuelo siempre .